Probablemente una de las fotografía de fantasmas más famosas de la historia. Mabel Chinery, tras visitar a su difunta madre en el cementerio, hizo una foto a su esposo que la esperaba en el coche. La sorpresa vino al revelar la imagen, pues la mujer identificó claramente a una persona situada en el asiento trasero; ni más ni menos que su difunta madre.
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